A la hora de diseñar un restaurante, bar, cafetería o cualquier negocio hostelero, no solo hay que tener en cuenta el aspecto del local o el mobiliario de hostelería sino también la comodidad y accesibilidad para todos los clientes. Por eso, debes pensar en como adaptar el local, y especialmente el baño, para minusválidos.
La disponibilidad de un baño accesible para los discapacitados es una cuestión de derechos e igualdad de oportunidades para todo el mundo. Pero es cierto que para adecuar un baño hay que tener en cuenta unas mínimas medidas del baño de minusválidos, características técnicas y otros aspectos necesarios que ahora comentaremos. Por lo que puede ser comprensible que, según las medidas del establecimiento hostelero, no pueda realizarse la adaptación.
¿Cuándo es obligatorio el aseo para minusválidos?
Esto nos lleva a la siguiente cuestión: ¿Cuándo es obligatorio el aseo para minusválidos? En este tema existen diferentes normativas disponibles. Por un lado, rige el CTE o Código Técnico de la edificación, que se ocupa también de los aspectos relacionados con la accesibilidad, igualdad de oportunidades, no discriminación y accesibilidad universal de las personas con discapacidad.
Por otro lado, entran en juego las legislaciones locales y autonómicas. Es decir, que cada comunidad y cada ayuntamiento tiene sus normas y son las que establecen la legislación final.
Sin embargo, existen un punto de partida general. Todos los locales de hostelería (con atención al público), deben tener al menos un baño y este debe ser adaptado a los discapacitados, según la nueva normativa. Esto es obligatorio para locales que inician su actividad, la modifican o realizarán obras de reforma. Pero los locales que ya están funcionando se rigen por la legislación existente en el momento en que iniciaron su actividad.
Pese a las variaciones que se puedan establecer según el territorio, existen algunas condiciones básicas que se deberán tener en cuenta en un negocio de hostelería.
Medidas del baño de minusválidos: pautas básicas
Existen algunos aspectos generales que podemos resumir del siguiente modo:
- Itinerario accesible: según las características del local, eso puede conllevar la incorporación de rampas de una anchura y pendiente máxima, según la normativa de cada territorio (que no suele ser máxima del %).
- El espacio del baño debe tener unas medidas mínimas de 1,80m x 1,90m: el motivo es que el baño disponga del espacio necesario para cualquier silla de ruedas, contemplando que el espacio de giro de estas tiene un diámetro de 1,50m. Y, además, esté libre de obstáculos.
- El baño debe incorporar barras de apoyo y diversos accesorios necesarios que ahora detallaremos.
- Las puertas deberán ser correderas o abatibles hacia el exterior.
- El lavabo, el espejo y el inodoro deben estar en un mismo espacio.
Características técnicas de los baños para discapacitados
Además de las medidas del baño de minusválidos, existen otros aspectos técnicos que cualquier negocio hostelero con un baño adaptado deberá considerar.
- Barras laterales de seguridad de obligada instalación: los baños para minusválidos tienen que tener instaladas barras laterales a cada lado del inodoro, a una altura de unos 70 centímetros. Estas deben estar fijadas en las paredes, y deberá ser abatible la que facilite el acceso lateral. El objetivo de las barras es que la persona pueda apoyarse en ellas. Por eso deben tener la capacidad de soportar el peso medio de una persona. Normalmente son de acero inoxidable y circulares, con un diámetro de unos 40mm de grosor.
- Inodoros: los inodoros deberán tener una altura de unos 50 centímetros y contar con un espacio a un lado mínimo de 80 centímetros. En cuanto a los mecanismos de descarga, se colocarán preferiblemente de palanca o de presión de gran superficie, a una altura de entre 0,70 y 1,20 metros del suelo.
- Lavabos: el lavabo deberá estar situado a una altura de entre 0,70 y 0,80 metros. Además, deberá tener un acceso frontal para que la persona pueda acercarse fácilmente al grifo, y sin obstáculos en la parte inferior, para que pueda caber debajo.
- Grifería: no solo hay que facilitar un lavabo accesible, sino que accesorios como la grifería también deben cumplir algunos requerimientos. Por ejemplo, que sea también fácilmente accesible y automática, con sistema de detección de presencia. Si esto no es posible y cuentas con grifos manuales, es recomendable que sean de estilo monomando con palanca.
- Diferencias cromáticas: los diferentes mecanismos y accesorios deberán diferenciarse cromáticamente para evitar que alguien con discapacidades visuales tenga dificultades para encontrarlos, en caso de que fuesen del mismo color.
- Puertas: las puertas deben ser correderas o abatibles, con una anchura mínima de 90 centímetros. La manija de la puerta debe situarse a una altura de unos 80 centímetros. Además, esta debe poder desbloquearse desde fuera en caso de emergencia.
- Avisador luminoso y acústico: en casos de emergencia, los minusválidos deben poder contar con un avisador para su seguridad.
Todas estas medidas son condiciones mínimas que hay que tener en cuenta, pero existen muchas otras consideraciones: toalleros, secadores, jaboneras... Lograr un baño accesible en un restaurante, bar o cafetería puede ser, en consecuencia, complicado. Pero haciéndolo garantizamos un servicio de calidad de vida a las personas con algún tipo de discapacidad, ya sean personas en sillas de ruedas o con discapacidades visuales o acústicas.
Además, si tu negocio de hostelería es accesible y adaptado a minusválidos podrá optar al Certificado de calidad “Q” del ICTE (Instituto para la Calidad Turística Española). Este certificado evidencia el cumplimiento de requisitos técnicos establecidos por la normativa, orientados al servicio del cliente. Los establecimientos con esta distinción pasan por auditorías que aseguran la calidad de su servicio, tratando de aumentar la fidelización de la clientela.
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